sábado, 14 de febrero de 2015

EL CAMEL TROPHY EN ESPAÑA.

A nadie se le escapa que Camel es una marca de tabaco y que patrocinó este evento. Tambien es cierto que Land Rover tenia mucho mas protagonismo como marca y tambien el resto de productos, como ropa y relojes, tenian mucha popularidad. De hecho los relojes Camel Trophy fabricados por la marca suiza Mondaine, tuvieron un exito enorme en España situandose varios años consecutivos en el TOP 10 de las marcas mas vendidas de relojes llegando a ocupar el 6º puesto en 1994 a pesar de ser relojes muy caros pero de gran calidad.

Quizas los fumadores identifiquen mas el CT con el tabaco, pero la verdad es que pocos lo identificabamos como tal y hoy dia con el destierro que se da al tabaco queda muy lejana aquella época donde se promocionaba su consumo.

El siguiente artículo viene de ese patrocinador, de Camel, y por tanto se refiere al exito que obtuvieron. Tambien hace referencia a los procesos selectivos y como se llevaban a cabo.

Fuente: www.paniagua.com


Hablar de Camel hoy en España e identificarlo  con una marca de tabaco consumida por un público joven, urbano y con espíritu aventurero y desenfadado es fruto de un duro trabajo que cayó en manos de Carlos Paniagua a principios de la década de los ochenta. En aquellas fechas "Winston era el líder del tabaco rubio americano en nuestro país, con una cuota del 85 por ciento del mercado, y le seguía Marlboro con una participación del 12 por ciento". "Se observaba, sin embargo, que en el futuro entrarían nuevas marcas de tabaco rubio, entre ellas Camel, que por aquel entonces era una marca poco conocida ". 

El estudio de mercado que los propietarios de Camel tenían sobre esta marca dejaba ver que el perfil de fumador objetivo era precisamente el de un "joven urbano, pero rompedor". El asesor en comunicación de la empresa tenía que ponerse a planificar las futuras acciones que fueran encaminadas a dar a conocer Camel entre su público. Fue así como empezó el Patrocinio de Camel en todas las pruebas de motociclismo de campo que se celebraban en España, desde trial, hasta motocross. Todas estas pruebas tenían en común el utilizar un vehículo totalmente urbano, joven y civilizado, pero al realizarse en el campo le dotaban de un carácter de riesgo. Justo la imagen que Camel quería proyectar.

El Patrocinio funcionó a la perfección, Camel estaba detrás de todas las pruebas de motociclismo de campo españolas, haciéndose responsable de los premios, medallas y otros costes. Sirva como anécdota de la buena organización y desarrollo del Patrocinio de Camel en las pruebas de motociclismo de campo español que Carlos Paniagua recibió nada menos que la "Medalla de Plata al Mérito Motociclista", llevándose la de oro el piloto Angel Nieto.

"Mientras estábamos patrocinando estas pruebas de motociclismo de campo en España, la división de Camel en Alemania estaba probando unos concursos de vehículos todoterreno, cuyos conductores mejor preparados hacían un recorrido por una selva del mundo". Era el año 1982 y tras la visita de los alemanes, el responsable en comunicación de la compañía en nuestro país se puso a diseñar el Patrocinio de Camel en un concurso de vehículos todoterreno en España, el Camel Trophy.

"Lo primero que hicimos fue elegir un portavoz, Miguel de la Quadra Salcedo, que obedecía perfectamente al esquema de personaje del concurso Camel Trophy". Acto seguido se realizó una presentación a todos los medios de comunicación relacionados con el mundo del motor. "Dentro de este mundo del motor tuvimos que buscarnos un hueco, haciendo una oferta diferenciada a todo lo que hasta el momento se había hecho. Lo nuestro no era una carrera normal, sino una aventura en la que se utilizaban los coches todoterreno".


La presentación de Camel Trophy en noviembre de 1982 se realizó a los medios de comunicación del motor con el apoyo de una campaña de publicidad. A los periodistas que acudieron a la cita se les entregó un amplio dossier de prensa, con las características del concurso, trayecto, calendario y perfil de los candidatos. A través de estos dos canales, medios de comunicación y publicidad, se hizo la convocatoria de concursantes que debían ser jóvenes, con ganas de disfrutar de una aventura, que ya hubieran vivido alguna experiencia arriesgada anterior, debían saber inglés y tener conocimientos de mecánica.

"Se ofreció un número de teléfono, que tenía cuatro líneas con un contestador automático, en el que los potenciales concursantes dejaban sus datos. Luego recibían un cuestionario que rellenaban y con ellos nosotros hacíamos ya la primera selección". El primer año del Camel Trophy los teléfonos y contestadores automáticos estuvieron instalados en el propio despacho de Carlos Paniagua y se recibieron un total de 4.127 llamadas pidiendo información.

De todos ellos sólo 1.934 potenciales candidatos enviaron la inscripción. Una persona del equipo de comunicación y Relaciones Públicas de Camel se encargó de llamarlos a todos para mantener una conversación básica en inglés y descartar a aquellos que no dominaran el idioma. "En esta preinscripción aparecieron candidatos de todo tipo, desde el alto ejecutivo, hasta el señor que había vivido en Kenya, el señor de Murcia que vendía productos de limpieza pero había vivido varios años en el Amazonas, uno que bahía hecho el trayecto Madrid-Ciudad del Cabo-Madrid en un Seat 600, etcétera. La gran mayoría habían viajado al Nepal o al Sahara como mínimo, y casi todos habían hecho el servicio militar en las COES. Era gente maravillosamente loca".

De gira por el país

Cuando la preselección básica ya estuvo hecha, comenzó la selección de los candidatos definitivos. Para ello el equipo de comunicación y Relaciones Públicas, miembros de la empresa Camel, Miguel de la Quadra Salcedo y numerosos periodistas del mundo del motor viajaron por las diferentes autonomías españolas con una caravana de quince vehículos todoterreno, generando una expectación entre toda la población y un auténtico ambiente Camel Trophy.
"Íbamos a Galicia, País Vasco, Cataluña, Cantabria, en función de las zonas donde más preseleccionados había. Cuando llegábamos allí nos instalábamos en las afueras de la ciudad, invitábamos a la prensa local y a los preseleccionados se les hacían una serie de pruebas físicas y mecánicas, Miguel de la Quadra les hacía unas comprobaciones de experiencia viajera y finalmente se hacía una prueba de conducción ".

Tras el periplo por España se seleccionaron a doce aventureros, a quienes se les llevó a Canarias para concursar en un mini Camel Trophy, invitando también en esta ocasión a más de veinte periodistas del motor. "A los periodistas esto les encantó porque vivieron una auténtica aventura, pudieron conocer y convivir con los doce seleccionados y se creó un buen ambiente entre todo el equipo". "Hay que tener en cuenta que el periodista del motor está acostumbrado a viajar para informar sobre la presentación de un nuevo vehículo, pero en el Camel Trophy ellos formaban parte de la expedición y lo mismo un día viajábamos en tren, que otro nos teníamos que quedar a dormir en un albergue o en mitad del campo en una tienda de campaña".

Durante los tres días que duró el mini Camel Trophy de Canarias, el seguimiento que hicieron los periodistas fue amplísimo, dando noticias de todo el desarrollo del concurso con fotografías espectaculares que se publicaron en todos los medios. Finalmente, de los doce participantes se seleccionaron a cuatro aventureros que serían los que ocuparían el todoterreno con el que España participa desde ese año en el Camel Trophy mundial.

Estos cuatro pilotos españoles fueron enviados a Eastnor Castle, localidad británica donde la marca de coches Rover tiene su campo de pruebas, con varios periodistas españoles que habían seguido desde el inicio la aventura de Camel. En Eastnor Castle se les hicieron numerosas comprobaciones a los pilotos y se les preparó en la conducción de los vehículos, tras lo cual se decidió quiénes de ellos serían los dos concursantes españoles y quiénes los dos suplentes en el Camel Trophy mundial que se celebró en el mes de abril y que consistió en recorrer 1.000 millas de la selva del Zaire.

Alcanzados los objetivos

Hasta la celebración de la final del Camel Trophy en el mes de abril, los cuatro participantes españoles estuvieron haciendo pruebas cada fin de semana con Miguel de la Quadra Salcedo en diferentes zonas del país. Los periodistas especializados, cómo no, también querían estar presentes en esas pruebas. "Se llegaron a formar periodistas auténticamente expertos en Camel Trophy, que se lo pasaban bomba yendo de prueba en prueba", comenta Carlos Paniagua.
"Hubo un año", recuerda él mismo, "que la presentación de Camel Trophy la celebramos en el zoo de Madrid. Aquel día cayeron nada menos que veintiséis litros de lluvia por metro cuadrado en tan sólo dos horas y se cortó la M-30. Pues a pesar de eso, aparecieron cerca de treinta periodistas en el zoo para cubrir la información. Habían hecho su propio Camel Trophy para llegar hasta allí".

Antes de que los cuatro pilotos españoles fueran al Camel Trophy se celebró una fiesta de despedida con la presencia de periodistas. A partir de ahí, se montó un amplio operativo de comunicación con la prensa que no acudió a la final. "Si los pilotos estaban en la selva del Amazonas que fue donde se desarrolló la aventura del año siguiente, por medio de radio transmitían a Manaus, de Manaus a Río y de allí a Madrid. Cada dos o tres días se redactaba y enviaba una nota de prensa sobre lo ocurrido a todos los medios de comunicación españoles. Los periodistas que habían ido a cubrir la información cuando llegaban a España sacaban reportajes de más de diez páginas ".

Sólo en el primer año, 1983, el concurso Camel Trophy tuvo en España 1.100.000 impactos en televisión; 7.400.000 impactos en radio; y 84 reportajes en prensa escrita. Pero más allá de la repercusión en medios, la mejor valoración del Patrocinio de Camel vino de Richard Golding, presidente de la compañía de tabaco R.J. Reynolds en España, quien reconoció que se habían triplicado los objetivos de venta de la marca Camel en nuestro país. Ese mismo año en North Carolina (EEUU), sede central de la empresa, la compañía le concedió un premio, ya que "España había sido el país de todo el mundo donde más había aumentado porcentualmente la venta de Camel".

El torneo Camel Trophy,  fue organizado en España por Carlos Paniagua durante los primeros nueve años para pasar después a tener su propio equipo de organización, se celebró con gran éxito. Cada año recibia del orden de 25.000 inscripciones y dió nombre a numerosos artículos de merchandising, como relojes, botas y equipos de aventura y supervivencia.

viernes, 13 de febrero de 2015

LAS EDICIONES

2 decadas duró este evento y estas fueron todas las ediciones:

AÑO EVENTO LUGAR RECORRIDO DISTANCIA VEHÍCULO Nº de EQUIPOS VEHICULOS SOPORTE
1980 Transamazonica Brasil Belem - Santarem 1.600 km Jeeps,    3  
1981 Sumatra Indonesia Medan - Jambi 1.600 km Range Rover, 2 ptas.,   5 Range Rover, 2 ptas.,  
1982 Papua New Guinea Norte de Australia Mont Hagen - Madang 1.600 km Range Rover, 2 ptas.,   8 Range Rover, 2 ptas.,  
1983 Zaire Oeste/medio-Africa Kinshasa - Kinsangani 1.600 km Series III 88" 7 Series III 109"
1984 Brasil Brasil Transamazonica Highway . Santarem - Manaus   Land Rover 110 12 Land Rover 110
1985 Borneo Kalimantan Indonesia Samarinda - Balikpapan   Land Rover 90 16 Land Rover 110
1986 Australia   Cooktown - Darwin 3.218 km Land Rover 90 14 Land Rover 110
1987 Madagascar Madagascar - SudAfrica Diego Suarez - Fort Dauphin 2.252 km Range Rover TD    14 Range Rover TD   
1988 Sulawesi  Indonesia Manado - Ujang Padang 2.092 km Land Rover 110 12 Land Rover 110
1989 Amazonas Brasil Alta Floresta - Manaus   Land Rover 110 14 Land Rover 110
1990 Siberia URSS Bratsk - Irkutsk 1.500 km Discovery 200 Tdi 3 ptas. 16 19 Discoveries
 
           
               
               
1991 Tanzania SudAfrica Dar es Salaam, Tanzania - Bujumbura, Burundi.  1.600 km Discovery 200 Tdi 5 ptas. 17 200 Tdi Defender 110
1992 Guayana Brasil Manaus, Brazil - Georgetown, Guyana.  1.600 km Discovery 200 Tdi 5 ptas. 16 200 Tdi Defender 110
1993 Sabah - Malasia Malasia Circumnavigation, Kota, Kinabalu - Kota Kinabalu. 1.500 km Discovery 200 Tdi 5 ptas. 16 200 Tdi Defender 110
1994 Argentina, Paraguay, Chile SudAmerica Iguazu Falls, Argentinië - Hornitos, Chili. 2.590 km Discovery 200 Tdi 5 ptas. 18 200 Tdi Defender 110
1995 Mundo Maya SudAmerica Lamanai, Belize - Mexico -Guatemala - El Salvador - Honduras - Xunantunich - Belize. 1.700 km Discovery 300 Tdi 5 ptas. 20 300 Tdi Defender 110
1996 Kalimantan  Indonesia Balikpapan - Pontianak 1.850 km Discovery 300 Tdi 5 ptas. 20 300 Tdi Defender 110
1997 Mongolia Mongolia Ulan Bator - Ulan Bator   Discovery 300 Tdi 5 ptas. 20 300 Tdi Defender 110
  El último  Camel Trophy "duro"        
1998 Tierra Del Fuego Chile, Argentina Santiago de Chile - Ushuaia   Freelander 18 300 Tdi Defender 110
2000 Tonga-Samoa   Nuku'alofa - Apia   Honda 16 Honda & 110 Hi-Capacity

2000 - TONGA SAMOA

La edición del año 2000 fue la más diferente de todas. La organización aportó vehículos de motor acuáticos en lugar de vehículos terrestres. Las aguas elegidas fueron las pertenecientes a los archipiélagos de Tonga y Samoa. Allí se disputaron pruebas en bicicleta, escalada y buceo, además de navegar en las lanchas fueraborda Ribtec 655 fabricados en Southampton y que disponian de una potencia de 130cv con un coste de 40.000 libras cada uno para los participantes y las Honda CRV y 110 HCPU como vehículo de soporte para la organización. En las pruevas de selección se siguieron utilizando Land Rovers asi como en la promoción del evento.

Los 32 participantes de 16 nacionalidades lucieron las banderas de Alemania, Austria, una coalición representando al Benelux, de nuevo la coalición escandinava, España con la Península y las islas Canarias, Francia, Grecia, Italia, Japón, Portugal, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Suiza y Turquía. Todos recorrieron unas mil millas náuticas.
 
 Los participantes tuvieron la oportunidad de recorrer y exprorar las exoticas aguas del Pacífico Sur asi como de conocer a los habitantes de las islas y lugares y poblados exóticos.

Las actividades incluian buceo, rapel, escalada, esquí acuático, kitesurf etc y exploración tradicional.


Sobre las razones para dar por finalizado el Camel Trophy existe discrepancia en las fuentes. Pero basicamente  el último evento cumplió los objetivos deportivos esperados, pero no así la repercusión en los medios de comunicación.

Land Rover lanzaría en el 2003 la llamadaG4 Challenge pilotando vehículos con una preparación especial, pero empleando el color naranja. Se disputó en países como Laos, Tailandia, Brasil o Bolivia, montando modelos como el Freelander o el Range Rover, además de bicicletas de montaña y kayaks.




1999 - PERU. EL INICIO DEL FIN

Despues del Camel Trophy  de 1998, Land Rover, uno de los mas importantes patrocinadores, consideró que el Camel Trophy se estaba alejando de la aventura y la exploración y no ofrecía el escaparate que habían esperado para sus vehículos. Un comunicado de prensa fue emitido en febrero de 1999 que indicaba que no patrocinaría eventos futuros. El Camel Trophy 1999, que se iba a realizar en Perú, fue cancelado.

18 años de patrocino llegan a su fin. Nota de prensa:

Durante los últimos 18 años, Land Rover y Worldwide Brands Inc., patrocinadores del Camel Trophy han trabajado juntos para construir un evento internacional sin igual. De esta reputación se han beneficiado mutuamente ambas partes. Proporcionan el máximo escaparate para vehículos Land Rover y los productos de promocion del evento Camel Trophy Aventura. A medida que cambian los estilos de vida, Camel Trophy ha evolucionado con éxito en un evento multi-disciplinado. Este cambio de dirección está dirigido principalmente a la ampliación hacia un público aún más amplio. Land Rover y WBI como resultado directo de este cambio en la estrategia han decidido disolver el acuerdo de co-patrocinio de desafío de aventura  al rededor del mundo y de caracter internacional, el Camel Trophy.

La conducción todavía tendrá un papel en el evento, pero el énfasis se ha alejado de un enfoque 4x4, y como tal, ya no maximiza los objetivos de patrocinio de Land Rover. La asociación, ha terminado en lo más alto después del  innovador
evento de los últimos años en Chile y Argentina, que ofreció un escaparate ideal para demostrar las capacidades off-road  del Freelander, el más nuevo 4x4 de Land Rover.

"Hay pocas relaciones de patrocinio que han resistido la prueba del tiempo con tanto éxito como la de Camel Trophy y Land Rover. Esta ha sido una excelente asociación para nosotros y con los años Land Rover ha dado  un excelente nivel de apoyo. Sin embargo, como el evento ahora incluye muchas otras actividades deportivas, el énfasis ya no puede permanecer solamente en el 4x4 ", comentó Nick Horne, el IBM director de Eventos Especiales.



Hablando sobre esta decisión, el Director de Marketing de Rover Group, Martin Runnacles dijo: "Hemos disfrutado de una relación única con el Camel Trophy durante las 2 últimas décadas y ha desempeñado un papel muy importante en el sostenimiento de la imagen de Land Rover como el fabricante de los mejores 4x4 en el mundo. Sin embargo con el cambio en la filosofía del evento, para nosotros ya no será un escenario para la demostración de la esencia de la marca - capacidad ilimitada. Deseamos al Camel Trophy muchos éxitos en su nuevo formato. Para Land Rover, las actividades futuras se concentrarán en nuestra clientela enfatizando la aventura del todoterreno duro.


 Jardine Wesson International PR Consultants
Date:
25 February 1999

1998 - TIERRA DE FUEGO

Las zonas del sur de Chile y de Argentina han sido los enclaves elegidos en esta ocasión para llevar a cabo la aventura. Lugares majestuosos, tan aconsejables para los amantes de la naturaleza en su estado más puro como para esos otros viajeros que disfrutan de la meditación, o para aquéllos que, aguijoneados por esa curiosidad tan humana, quieren llegar a conocer unas idiosincrasias completamente distintas a la suya. Ahora bien, no se trata de un lugar fácil, y menos todavía en pleno invierno.

Barrera infranqueable.

Los Andes, la cadena montañosa más larga del mundo, representa una barrera natural en ocasiones infranqueable, y viajar por sus alrededores puede convertirse en una pesadilla si el tiempo no acompaña. Por aire, muchos pequeños aeródromos a un lado y a otro de la cordillera sufren los rigores extremos del invierno austral, y sin embargo, los atrevidos pilotos locales tampoco se andan con grandes miramientos. Agarran sus máquinas voladoras -generalmente sin capacidad para ascender por encima de los 6.000 metros- y ratonean por los senderos aéreos entre las cumbres de hielo, en un espectáculo imponente que, inevitablemente, hace recordar aquella terrible catástrofe aérea ocurrida en el año 1973 en el mismo lugar.
Por tierra, el recorrido natural desde Santiago de Chile, rumbo sur, es la carretera Panamericana, un recorrido de algo más de 1.600 kilómetros de asfalto, muy ruteros y exigentes. El paisaje, que combina verdes valles con lagos y nieve, cambia bruscamente en pocos kilómetros dependiendo de si se circula paralelamente al Pacífico, por el Valle Central chileno o por los Andes.

La mítica carretera llega hasta las inmediaciones de Puerto Montt, pero ya antes empieza a ser una necesidad cruzar la frontera hacia Argentina. La turística región de Bariloche se encuentra muy bien comunicada y los pasos fronterizos persiguen a los valles. Hasta llegar a esa zona los equipos no tuvieron grandes contratiempos, salvo los ocasionados por la meteorología, que estuvo especialmente caprichosa en la alta montaña.
En esa región las cosas cambian. En dirección sur hasta Tierra del Fuego se encadenan, sin solución de continuidad, una veintena de parques nacionales en una explosión de naturaleza sin parangón similar en otras zonas del globo. Se deja atrás la civilización, las comunicaciones se endurecen y el clima es cada vez más implacable.

Cada vez más difícil.

En el lado chileno, seguir la ruta es prácticamente imposible por el tapón que representa el Campo de Hielo Sur, una vasta extensión de hielo al estilo antártico aún hoy fuente de disputas territoriales con sus vecinos argentinos. Es conveniente por ello utilizar la carretera Austral que discurre en dirección sur por la Pampa argentina, con destino final en la isla de Tierra del Fuego. El vehículo oficial del Camel Trophy, el Land Rover Freelander, respondió a las expectativas levantadas y cumplió con suficiencia en nieve y barro -gracias a su dispositivo de control de tracción- y con brillantez por las pistas, gracias a su fenomenal suspensión. Pero no quiere decir que no pasara sus dificultades, a veces grandes.

Impregnarse del sabor tan rural que desprenden los pocos focos de civilización que se encuentran es uno de los grandes atractivos del viaje. Son pueblos, sobre todo los más próximos a la cordillera, sin apenas comunicación exterior, aislados por los rigores del clima y por la escasa densidad de población de la zona.
En muchos de ellos, la radio es el medio de comunicación por excelencia, ofreciendo un servicio de avisos a los habitantes al estilo de nuestra Radio Nacional de España. La vida discurre allí al ralentí, entre la ganadería, el comercio, la vida contemplativa y el pisco, la bebida nacional chilena capaz de convertir conversaciones tranquilas en trenes de largo recorrido.

Zigzaguear a un lado y otro de la frontera entre Chile y Argentina permite al viajero sacar algunas conclusiones de cierto empaque. De entrada, los muchos controles fronterizos, a medio camino entre burocráticos e impermeables, no son más que la consecuencia lógica de una relación entre dos países que se miran de reojo. Las rencillas por la soberanía de algunas tierras, islas o aguas han abierto unas heridas tan graves que únicamente el tiempo se va encargando de cicatrizar.

Tristes recuerdos.

En esta edición del Camel Trophy, que cruzaba la frontera tantas veces como se cruza una calle, los británicos no las debieron tener todas consigo. Pero en el aeródromo de Esquel, al sur de Bariloche, mientras un capitán y un cabo argentinos cumplimentaban entre bromas y anécdotas los trámites aduaneros de cinco ingleses, nadie recordó a Las Malvinas. Sólo este periodista reparó en el cuadro colgado encima de sus cabezas.

Era el recuerdo a todos los hijos de Esquel caídos en el conflicto. La impresión es que muchos argentinos han pasado ya esa página de su Historia, aunque más al sur y más al este -desde donde se llevó todo el peso de las operaciones militares argentinas-, el drama bélico sigue todavía muy presente fresco en la memoria de muchos.

Ya en Ushuaia, un maravilloso cartel situado a la entrada del nuevo aeropuerto, construido el año pasado, reza su nombre oficial: Aeropuerto Internacional de Ushuaia Malvinas Argentinas.
Por las pistas forestales que unen unos pueblos con otros, el viajero se topa continuamente con un paisaje maravilloso de volcanes, lagos, glaciares y estepas que, en conjunción con unas temperaturas bajo cero y unos vientos huracanados, dan a la Patagonia una nítida sensación de misterio, aislamiento y soledad.

Es la misma sensación que transmiten, en cierto modo, las gentes allí residentes, gentes sencillas, amables y poco acostumbradas a la cuna y la cátedra. Pero curiosamente, gentes muy distintas a un lado y a otro de la cordillera andina, con un español muy confuso al oeste, muy poético al este. Más reservados y americanizados los moradores del oeste, más sofisticados y latinos los del este.

Casi hasta el polo sur

Desde Santiago de Chile hasta el lugar más al sur del planeta accesible en coche. Más de 8.000 kilómetros en 20 días. Este fue el programa del Camel Trophy, un recorrido con sólo tres controles, en Pucón, Futaleufú y Torres del Paine. Desde Santiago hasta Pucón los equipos procuraron esquivar la cordillera andina. Los primeros 1.000 kilómetros discurrieron por el Valle Central. En Pucón los participantes llevaron a cabo una expedición de seis horas al volcán Villarrica, uno de los más activos del mundo.
Desde allí, los equipos español y canario se adentraron en territorio argentino, por San Martín de los Andes y San Carlos de Bariloche. El segundo reagrupamiento fue en Futaleufú, pintoresca localidad fronteriza de Chile, donde hicieron un descenso en rafting. Fue entonces cuando se adentraron en la Patagonia.
Llegaron al Perito Moreno, el glaciar más activo y alto del mundo, un día antes de otro reagrupamiento, en el Parque Nacional de las Torres del Paine. Allí hay tres grandes picos de granito que se levantan desde los 50 metros hasta los 3.000.
El acceso de los equipos a la isla de Tierra del Fuego se realizó siguiendo la ruta Puerto Natales-Río Gallegos-Punta Arenas, única posible para no quedar atrapado en un caos de pequeñas islas. Desde allí condujeron 200 kilómetros hasta llegar a Ushuaia, puerta de entrada al mítico Cabo de Hornos y a la Antártida.


Ellas siempre ganan
España presentaba, por vez primera en la historia del Camel Trophy, un equipo enteramente femenino. Emma Roca y Patricia Molina han hecho añicos la creencia de que la aventura es sólo para caballeros. En este Camel Trophy que ha combinado estrategia, navegación y fortaleza, las dos chicas han quedado sextas en la clasificación general, segundas en conducción y vencedoras en el Trofeo Land Rover, al haber accedido a un total de 74 controles con el Freelander.

Han conducido bajo lluvias torrenciales, colosales nevadas, barro, hielo y nieve. Pero, por encima de todo, su estrategia ha sido impecable. Noche tras noche perdían el tiempo necesario, mapa y GPS en mano, para planear la etapa. Además, la compenetración entre ambas fue modélica. Sin ninguna duda ese espíritu de equipo les dio su excelente clasificación. Emma, bióloga de 24 años, mandando en bicicleta de montaña y navegación. Patricia, estudiante de INEF de 22 años, al mando del esquí y de la conducción.

La anécdota vino de la mano de una cadena de televisión chilena. Dos periodistas siguieron durante un día a las dos españolas para grabar imágenes de su actuación. Esa noche, mientras cenaban en una pequeña hostería en la cordillera andina, vieron la emisión del programa, que ponía en duda la capacidad del sexo débil para hacer un digno papel en el Camel Trophy. El azar quiso que al día siguiente se los encontraran. "Oye, ¿qué es eso del sexo débil?" recriminó una de las corredoras. "Yo no fui" dijo el acorralado periodista. Debiera haberlo sabido, ellas siempre ganan.

1996 - KALIMATAN

Aunque las tareas especiales, o Special Task, fueron introducidas a principio de decada, la edicion de 1996 es considerada por muchos como la última edición del Camel Trophy tradicional.

El inicio se situó en la localidad de Balikpapan al este del Kalimatan. La ruta se desarolló por el corazón de Borneo hasta el final a unos 100km aproximadamente de Pontianac en la costa Oeste.

Se cruzó el río Balikpapan para despues adentrarse en la selva y posteriormente en terreno montañoso.

 


Muchas de las pistas y sendas del interior no habian visto un vehiculo motorizado desde hacia mas de una decáda y estaban en muy malas condiciones.


 En la ruta hacia Muaratewe se encontraron condiciones muy duras debido a las lluvias caidad que convirtieron la zona en un autentico barrizal. Los equipos lucharon durante dias en condiciones muy duras dirigiéndose hacia el pequeño puerto fluvial y lugar de paso en Tumbang Samba. Las condiciones fueron tan malas y el progreso de la prueva era tan lento que para terminar la prueba dentro del calendario previsto, se recortó la ruta evitando varios pasos dificiles.






El convoy del Camel Trophy seguia su ruta dejando a tras las condiciones dificiles pero con retraso sobre el horario planificado. Los días se convirtieron en maratones 24- horas, cada uno con su propio conjunto de problemas a superar. Finalmente, después de haberse suspendido una sección prevista en el extremo sudoeste de la isla, los participantes cansados llegaron al último sitio de trareas especiales  en la costa cerca Singkawang. Un día y medio de tareas especiales seguidos antes de que los equipos llegasen al final en convoy para la entrega de premios. Final que fué celebrada más tarde esa misma  noche en el hotel principal de Pontianac



Video completo en inglés:






1990 - BAIKAL - URSS

Por primeravez en la historia del Camel Trophy, el evento se celebró en el emisferio norte.

El evento ademas tenia especial relevancia ya que ningun otro evento internacional tuvo lugar en la URSS.

La caravana pasó por los vastos bosques del este de siberia y tuvo como protagonista el lago mas profundo del mundo con 1680m, el lago Baikal.


El Camel Trophy partió desde   Bratsk en dirección sur hasta Kob, luego continuó a través del inmenso bosque de Tiga, desde Kachug hasta el lago Biakal, despues al oeste hasta el final en Irkutsk en el río Angara. El total abarcaba poco más de 1.600 km.












Al final del evento, la victoria general fue para el equipo holandés de Rob Kamps y Stijn Luyx, que se llevó el Camel Trophy por segunda vez. El codiciado Premio Espíritu de Equipo fue para el equipo de las Islas Canarias de Carlos Barreto y Fernando Martín.
 
 
 
 
 Los participantes:



Paises participantes:
Austria Karl Haas & Christian Laucher
Belgium Alain Duriau & Rudy Coenen
Canary Islands Carlos Barreto & Fernando Martin Premio Espiritu de Equipo
France Jean Barry & Philippe Bessat
Germany Erik Brandemberg & Hanes Herman Ruthe
Greece George Delatolas & Nick Pastras
Holland Rob Kamps & Stijn Luyx Ganadores Camel Trophy
Italy Giuseppe Griffo & Umberto Fiori
Japan Bunshiro Tani & Masaquni Hisayuki
Russia (Soviet Union) Mark Poldaski & Anatoly Kuznetov
Spain Alex Baylin Zaldua & Moises Torrallardona I Jou
Switzerland Vito Augustin & Jean-Samuel Costa
Turkey Gengiz Kadir Nomer & Cem Kitapci
United Kingdom Andrew Dacey & Richard Tomlinson
United States Lee Magee & Fred Monsees
Yugoslavia Andrej Skafar & Ognjen Sokolovic
Coches de equipo: Land Rover Discovery 200Tdi 3 puertas (19)
Vehiculos de soporte: Land Rover 110 (4) y 127 (5)
Distancia: por carretera ,1650 km
Número de equipos: 16